Llegan para declarar las maestras mendocinas de Florencia Di Marco

Se trata de las maestras de grado de Florencia, de las cuales una había advertido a Carina Di Marco sobre los posibles abusos que sufría su hija. También declarará una empleada de la escuela “Florentino Ameghino” y las madres de dos compañeros de la nena que conocían la historia o el entorno familiar.

Las testimoniales, según confirmó la jueza Palacios a elchorrillero.com comenzarán mañana a partir de las 8 en el edificio de Tribunales.

Ante un fiscal de la provincia mendocina estas personas, llamadas ahora por la Justicia de San Luis, brindaron datos que fueron fundamentales para dictar el procesamiento de Carina Di Marco como “partícipe necesario” en la muerte de su propia hija.

María Teresa García Lobos y Adriana Ramírez son las dos docentes que llegarán a San Luis para brindar su declaración informativa en la causa, a primera hora de este jueves 4 de mayo.

En su primer testimonio, García Lobos confirmó que, aunque sin recordar la fecha, participó de una reunión escolar a la que habían citado a Carina Di Marco antes de que se fuera a San Luis. Dijo que su colega, Adriana Ramírez, la había llamado para hablarle porque “sospechaba” que la nena sufría abusos por parte del padrastro.

La docente dejó en claro que no estuvo presente todo el tiempo en la reunión, que “iba y venía”, y que por eso no sabía precisar cuánto tiempo estuvieron hablando la docente y la madre de Florencia. Sin embargo, su colega le advirtió posteriormente que Di Marco “se había enojado” cuando le dio a entender que Lucas Gómez, su pareja, podría estar ejerciendo algún abuso sobre la menor.

Adriana Ramírez confirmó ante el fiscal N° 2, Martín Scatareggi, que llamó a Carina Di Marco en el momento que esta había solicitado el pase de su hija. “Lo pidió a través de Florencia, entonces le dijimos que debía hacerse presente”, expuso en su declaración. Por ese motivo se dio el encuentro en la escuela.

Cuando Di Marco concurrió a la institución, Ramírez le dijo que Flor “perdía mucho al irse a San Luis”, ya que se encontraba “en el proceso de aceleración”. En la charla la maestra le preguntó a Di Marco si había notado cambios en Florencia, dado que la nena les había contado que “estaba triste por irse a San Luis”, que no quería partir. Le recalcó que la nena “quería quedarse con los abuelos porque el papá “la acariciaba”.

Según Ramírez, Di Marco respondió “que no podía ser”, porque “él la cuidaba y la quería como un padre”. “Además, la mamá dijo que la niña mentía y quedó todo ahí”, indicó la maestra. Y puntualizó que la madre resaltó que “Flor era mentirosa”.

El día siguiente de la reunión, recordó, comenzaban las vacaciones de invierno, y ya “no supo” más de ellas.

Confirmó que la semana previa al receso escolar, Florencia ya no concurrió a clases; pero que antes sí pudieron realizarle, junto a sus compañeros, la despedida.

Florencia le confesó a Ramírez que su papá “la acariciaba mucho”. La maestra dijo ante la fiscalía que intentó indagar cómo la acariciaba, pero que la nena no agregó más nada.

“La madre nos dijo que era mentira, que la niña mentía. Que él la tenía de chiquita, que la cuidaba, la protegía, la iba a ver si estaba tapada o si estaba destapada, que la quería como un padre, dijo que eran ocurrencias de la niña”, aseguró la maestra en su testimonio.